Semana 14
Clase del lunes 29 de
abril, a tres semanas de terminar el semestre
Como es de costumbre la clase dio
inició con la lectura de bitácoras, recordando lo de clase pasada hablamos de
cómo es más fácil hacerse viral por lo negativo que por lo positivo. Por ejemplo,
Luisa Fernanda W en estos días se ha vuelto más viral por el hecho de que ha
tenido pequeños encuentros con el cantante Pipe Bueno. Los usuarios la están criticando
porque dicen que en menos de tres meses ya superó la muerte de su novio
Legarda, hasta han llegado al punto de crees memes sobre el tema. Pero en caso
de que alguien haga algo bueno o aporte algo a la sociedad no le dan ni la más
mínima importancia, los usuarios prefieres darle like a los chismes falsos, a
la morboso, a lo trágico, los hace más felices ver como sufren las personas que
están en un nivel más alto de la sociedad. Recordando clases pasadas “ El ser
humano es jerárquico por naturaleza”.
Continuando la clase, una
compañera expuso el libro “Pulgarcita”
de Michel Serres. El autor hace protagonista a la generación de los millennials,
aquella que depende totalmente de la tecnología y utiliza más que nada los pulgares. Si nos
ponemos analizar a nuestros abuelos y
papas cuando usan los aparatos electrónicos utilizan más que todo es el dedo índice.
Serres plantea una frase muy interesante “El individuo
ya no sabe vivir en pareja, se divorcia; ya no sabe estar en clase, se mueve y
charla”. Hoy en día, podemos ver reflejado esto claramente en los restaurantes,
si uno se pone a observar a todos los presentes notará que un 1% no tiene el
celular en la mano y está charlando con su acompañante, el 99% restante está
totalmente hipnotizado con su aparato móvil ignorando lo que pasa a su alrededor.
Estamos perdiendo tiempo que jamás regresará, olvidamos que nuestros seres
queridos no son eternos y preferimos contarle al mundo lo que estamos haciendo
con ellos en vez de vivir el momento y recordarlo para siempre en nuestras
mentes. Otro ejemplo es cuando vamos a un concierto, nos centramos en presumir
en redes sociales de lo que estamos viendo y cuando nos damos cuenta ya nos
hemos perdido todo.
Otro tema que menciona el autor
es como los maestros deben adaptarse a
esta nueva era. Tienen que estar conscientes de cómo la forma de dar una clase ha
cambiado, no pueden pretender que sea igual a
hacer unos años donde el maestro llegaba y dictaba la catedra y ya.
Ahora es diferente, tiene que existir una inteligencia colectiva (como en el
Web 2.0) donde le profesor transmite lo que sabe pero, asimismo, el estudiante interactúa
constantemente con toda clase complementando los temas con lo que puede
encontrar en internet. Hay que evolucionar conforme evoluciona la época. Si los
profesores no empiezan a utilizar la tecnología para enseñar a los estudiantes
y por el contrario se la prohíben van a perder totalmente la atención del
alumno.
Otro ámbito que ha cambiado
significativamente es el ámbito laboral, ya no es como antes que las personas
se graduaban y entraban a trabajar en una empresa en la cual duraban todo la
vida, ahora es diferente todo de trata
de proyectos, no nos podemos quedar con lo mismo siempre porque no vamos a
avanzar, tenemos que innovar para poder subsistir en este nuevo mundo.
Las generaciones antiguas ven a la nuestra como más perezosas, flojas y vagas, pero no saben o no han llegado a entender todo el
contenido y actividades que se pueden realizar con la tecnología. Puede que no leamos
o escribamos tan profundo como en el pasado, pero si lo hacemos más constante. Por
ejemplo, un gran porcentaje de la sociedad se la pasa escribiendo estados en Facebook
o en Twitter, publican algo por lo menos una vez al día.
Puede que la tecnología tenga sus
cosas negativas como el hecho de alejarnos de nuestros seres queridos pero
asimismo nos acercan a los que tenemos lejos. La tecnología nosotros mismos la
transformamos para hacernos daño, tenemos es que utilizarla para avanzar y
mejorar la sociedad, no para perjudicarnos más.
Comentarios
Publicar un comentario